El Fondo aseguró que el ajuste significativo podría estabilizar la economía; su economista jefe anticipó cómo seguirá la suba de precios este año y destacó la necesidad de reformas fiscales y monetarias.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) recalculó su estimación para la economía argentina este año y proyectó una fuerte caída de 2,8% como consecuencia del “ajuste considerable” que experimentará a lo largo del 2024 por las medidas del gobierno de Javier Milei. Para el año próximo, de todas formas, prevé un pronunciado rebote de 5 por ciento. La recesión y la inflación serán tan pronunciadas este año que solamente la Argentina empujó un recálculo hacia la baja para toda la región y los países emergentes, mencionó el reporte.
“Como en otras economías importantes de la región, se registran mejoras de 0,2 puntos porcentuales para Brasil y 0,6 puntos porcentuales para México, principalmente a causa de los efectos de arrastre de una demanda interna más fuerte de lo esperado y un crecimiento mayor de lo previsto en los principales socios comerciales”, abundó el informe del Fondo.
La inflación de este año
Sobre la inflación argentina, el FMI apuntó que “se espera que la realineación de los precios relativos y la eliminación de los antiguos controles de precios, la última depreciación de la moneda y su traspaso a los precios hagan subir la inflación en el corto plazo”. En diciembre el índice de precios marcó un 25,5% (211% anual) y se espera que en enero haya alguna señal de desaceleración, aunque todavía en la zona del 20% mensual, en parte por el arrastre estadístico del último mes de 2023.
Este miércoles el FMI tratará en su directorio el caso argentino. La agencia Reuters informó que, además de la discusión del informe de staff por la séptima revisión técnica que finalizó el 10 de enero pasado y la luz verde para un nuevo desembolso por USD 4.700 millones, el board podría habilitar una postergación de la última revisión del programa Extended Fund Facility (EFF), que está pautada para septiembre. Tendría lugar en noviembre y abriría la puerta para la negociación de un programa enteramente nuevo.