El presidente de la Unión Industrial Argentina (UIA), Martín Rappallini, advirtió sobre el fuerte deterioro de la actividad económica en los últimos meses. Según afirmó en declaraciones a Radio Rivadavia, desde marzo se pierden entre 1.000 y 1.500 empleos por mes en el sector industrial, y algunos rubros específicos registran caídas de hasta el 30%.
“Esto ocurre en áreas como la construcción, el cuero o el calzado. Otros sectores, como alimentos o el farmacéutico, están mostrando cierta recuperación, pero la pérdida de empleo es sostenida”, detalló.
Aunque reconoció que la apertura de importaciones impulsada por el gobierno de Javier Milei genera preocupación, Rappallini insistió en que el problema principal es la profunda caída de la actividad económica. “La importación impacta, pero estamos más preocupados por la actividad. En materiales de construcción y en textil o calzado, la baja ronda el 30%. Ahí está el verdadero golpe”, subrayó.
En este escenario, muchas empresas apelan a mecanismos de suspensión de personal para evitar cierres. Sin embargo, eso conlleva consecuencias directas sobre los salarios. “Se hacen acuerdos donde se paga sólo una parte del sueldo y no se abonan aportes. Son prácticas habituales cuando la actividad no repunta y los costos se vuelven impagables”, explicó.
Rappallini también planteó la necesidad de discutir una reforma laboral y fiscal estructural. “Hace años venimos diciendo que es necesaria una reforma impositiva. En los últimos 20 años acumulamos distorsiones que hay que corregir. Si no se igualan las condiciones, los empresarios quedan en clara desventaja frente a la competencia global”, argumentó.
Por último, alertó sobre los efectos negativos de las elevadas tasas de interés. “Es preocupante. Esperamos que puedan bajar las tasas porque ya se empieza a notar el aumento de la morosidad y de los cheques rechazados. Por ahora el impacto no es por las tasas, sino por la dinámica de la actividad. Pero hay que tener cuidado, convivir con una tasa tan alta es complicado”, advirtió.