Llaryora concurrió acompañado por la Vicegobernadora Myrian Prunotto y el Viceintendente de Córdoba, Javier Pretto.
El encuentro se realizó en la vivienda del abogado Emilio Viramonte, cónsul honorario de Suecia y Dinamarca.
Distintas fuentes comentaron que la reunión fue en «muy buenos términos». El gobernador planteó cuestiones como el respaldo a la gobernabilidad, pero se diferenció de algunas medidas que impulsa el Gobierno nacional, como por ejemplo, reponer las retenciones a las economías regionales.
Llaryora habría expresado que está de acuerdo con la estrategia del Gobierno nacional de buscar un equilibrio fiscal, aunque advirtió que no se debe hacer a costa del sector productivo.
Por su parte, Villarruel explicó algunas de las medidas que impulsa la gestión del Presidente Javier Milei, y planteó que el Gobierno nacional necesita de respaldo político para sancionar leyes en el Congreso.
La vicepresidente le transmitió a Llaryora que la gestión de Milei «necesita del respaldo de los gobernadores» a través de sus legisladores nacionales.
El mandatario cordobés reiteró su apoyo a «la gobernabilidad», pero aclaró que los legisladores nacionales del PJ cordobés no convalidarán ningún proyecto que vaya en contra de los intereses de Córdoba.